Durante esta semana, buscamos fortalecer nuestra comunión con Dios y entre nosotros, intercediendo por la obra misionera y el avance del evangelio en todo el mundo. Las donaciones recibidas durante este tiempo son utilizadas para apoyar diversas iniciativas, como becas para viajes misioneros, contribuciones a la Convención Hispana, la compra de materiales educativos y recursos para la formación cristiana, así como el respaldo de otros proyectos misioneros. De esta manera, la Semana de Oración se convierte en un tiempo de acción y fe, donde nuestras oraciones se transforman en acciones concretas para llevar el mensaje de Cristo a más personas.